Santo Tomás enseña que "la unidad pertenece a la fides, de la misma manera que la inseparabilidad pertenece al sacramentum". Estas palabras, leídas conjuntamente con las del canon 1056 -"las propiedades esenciales del matrimonio son la unidad y la indisolubilidad"-, parecen indicar que, de la misma manera que el "bomun sacramentum" y la indisolubilidad son sinónimos, lo son igualmente el "bonum fidei"y la unidad.